viernes, 17 de julio de 2009

Los precios agrícolas: un problema estructural

Hoy Viernes 17 de Julio, La Verdad de Murcia, publica un artículo escrito por Pilar Ayuso y por mí en referencia a los precios en orgien, os lo dejo también aquí, en mi blog, espero que os parezca interesante.
La fluctuación de los precios agrícolas ha sido siempre un hecho natural debido a dos componentes: el volumen de las cosechas y los tiempos de recolección, especialmente en los productos perecederos. La mejora de los transportes ha conseguido equilibrar los precios al reducir los tiempos de transporte y realizarlos en condiciones cada vez mas apropiadas.
La caída de los precios agrícolas en origen es sin duda el mayor problema que afecta en estos momentos al sector español, problema que será recurrente si la Unión Europea y el Gobierno de la nación no aplican las medidas oportunas. La estruendosa bajada de los precios que percibe el agricultor español no se está viendo reflejada en los lineales de los supermercados.
El grado de concentración de las grandes superficies, supermercados y cadenas de distribución ha supuesto una posición dominante en la formación de los precios, frente a la oferta atomizada de los agricultores, desconocedores generalmente de la geografía y los tiempos de producción y sin ningún poder colectivo. Su única defensa son los gobiernos y las leyes que no existen.
Tras la nefasta negociación de la última reforma de la PAC, avalada por el Gobierno socialista, la volatilidad de los precios se convierte en la tónica habitual del mercado y dificulta la planificación por parte de los agricultores y ganaderos de su actividad a medio y largo plazo. La inestabilidad de los precios es ya un problema estructural, como consecuencia del desmantelamiento de las medidas de gestión de los mercados decidida en el marco del denominado Chequeo Médico de la PAC donde las medidas de apoyo al mercado han sido prácticamente desmanteladas.
La PAC será sometida en los próximos años a una nueva revisión que entrará en vigor tras el 2013, en donde podría haber nuevos recortes en los apoyos que reciben los agricultores europeos. Esperemos que con vistas a esa revisión, el Gobierno español reflexione sobre las consecuencias de las últimas negociaciones y decida defender a los agricultores españoles mejor de lo que ha hecho hasta ahora en las instituciones europeas.
El Partido Popular denunció en el Parlamento Europeo la diferencia que existe entre los precios en origen y los precios al consumo y consiguió la aprobación de un informe que recoge, entre otras recomendaciones, las siguientes:
Mejor gestión de los mercados agrícolas para garantizar una estabilidad en los precios. Establecer un marco jurídico comunitario dirigido a evitar las prácticas abusivas, promover un reparto más justo de los márgenes comerciales y favorecer unas relaciones equilibradas entre los distintos agentes de la cadena alimentaria.
Favorecer la concentración de la oferta agrícola mediante el apoyo de figuras asociativas, para aumentar el poder y capacidad de negociación de los agricultores frente a los agentes comerciales.
Informar al consumidor sobre los costes añadidos y los esfuerzos realizados por los agricultores para cumplir la normativa de la UE en materia de medio ambiente, seguridad alimentaria y bienestar animal con el fin de ofrecer productos de calidad máxima frente a las producciones de países terceros con las que tienen que competir.
Exigir las mismas condiciones de producción a los productos importados de terceros países que compiten con los nuestros.
Como eurodiputadas del Partido Popular, apoyamos a los agricultores en sus reivindicaciones.

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